12 noviembre, 2024 · Blog
En los hogares actuales, los cuartos de baño suelen ser uno de los espacios más reducidos, y muchas personas enfrentan el desafío de optimizar el espacio al máximo sin perder comodidad ni estilo. Uno de los elementos clave que a veces parece complicado de incluir es la ducha. Aún así, con algunos consejos de diseño y distribución, es totalmente posible tener una ducha funcional y elegante, incluso en el cuarto de baño pequeño.
Duchas esquineras
Las duchas de esquina aprovechan al máximo el espacio sin invadir el área central del baño. Son una gran opción para baños pequeños, ya que ocupan las esquinas, dejando el resto del baño libre. Además, una ducha empotrada puede crear una sensación de continuidad en la pared, haciendo que el espacio parezca más grande. Puedes optar por diseños que se funden con las baldosas del baño, aportando armonía y amplitud visual.

Mamparas transparente y ducha compacta
Para evitar que el baño se vea más reducido, opta por puertas de vidrio transparente o mamparas sin marco. El vidrio permite que la luz circule por todo el espacio y crea una sensación de continuidad. Las mamparas plegables o correderas también son una opción práctica, ya que no requieren espacio adicional para abrir y se integran mejor en espacios estrechos.
Las columnas de ducha compactas son perfectas para baños pequeños porque ocupan menos espacio que las bañeras tradicionales o duchas de tamaño completo. Algunas incluso cuentan con funciones de hidromasaje y otros extras sin ocupar mucho espacio. Puedes elegir columnas de ducha de pared a pared o integradas en la esquina, de acuerdo a la distribución del baño.

Tonalidades e iluminación
El color y el tipo de baldosas que elijas pueden influir enormemente en la percepción de amplitud en el baño. Los tonos claros y neutros, como el blanco, el beige o el gris suave, reflejan la luz. Estos colores crean una sensación de espacio abierto. Las baldosas de tamaño grande o en mosaico en tonos claros ayudan a que la ducha parezca parte del baño. Esto se consigue a que no interrumpe el flujo visual. Se trata de una opción ideal en espacios reducidos.
En un baño pequeño, una buena iluminación es esencial. Asegúrate de que haya luz suficiente tanto en el área de la ducha como en el resto del baño. Si es posible, usa luces LED empotradas que no ocupen espacio y que se puedan ajustar según el uso del baño. La luz blanca y neutra tiende a hacer que el espacio se vea más amplio y limpio. Así se genera mayor sensación de mayor amplitud.
Baño pequeño y funcional

Tener un baño pequeño no significa renunciar a una ducha cómoda y estilizada. Con una buena planificación, aprovechando las esquinas, utilizando colores claros y eligiendo muebles que ocupen poco espacio, puedes integrar una ducha perfectamente funcional sin comprometer el estilo. Además, el uso de vidrio y mamparas transparentes te permitirá mantener la luz y el flujo visual. De este modo lograrás que tu baño pequeño se sienta más grande y acogedor.